Una visión positiva de lo vivido.
Esta crisis ha hecho que volvamos a dar valor a cuestiones verdaderamente esenciales, la normalidad de acudir a diario a un espacio de trabajo, de compartir proyectos con los compañeros, de disponer de un tiempo de ocio con amigos o familiares. La aparición de tantas iniciativas altruistas y solidarias, tanto de empresas como de particulares, subrayan lo mejor de nuestra forma de entender y compartir la vida. La sociedad española rebosa resiliencia, creatividad, solidaridad y saber hacer cuando las cosas vienen mal dadas.
Retos para el futuro.
Las compañías y la sociedad hemos experimentado una fase de vulnerabilidad extrema y existe la necesidad de recuperar la normalidad cuanto antes. Algunas tendencias se van a acelerar, como la posibilidad de trabajar en remoto y de formarse online como base del aprendizaje continuo del profesional.