Una visión positiva de lo vivido.
Algo que me ha llamado mucho la atención es como nos hemos volcado todos por cumplir con las normas, en un momento muy duro para todos, no solamente por la parte del confinamiento sino también por la carga emocional de este proceso. Creo que como personas, grupos y organizaciones nos hemos dado cuenta que solo desde la colectividad vamos a vencer este virus. Hemos demostrado ser más humanos que nunca, vulnerables pero también inasequibles al desaliento. Que se preparen las terrazas!
Retos para el futuro.
Creo que van a cambiar dos cosas fundamentales: la primera, la forma de gestionar las prioridades, cuando te toca algo así de cerca, te pone los pies de golpe en el suelo; la segunda, la forma en que nos relacionamos con otros. Ahora vamos a ser mucho más conscientes de la importancia de tener gente a tu lado y no estar solo. Vamos a ser más abiertos con otros.